¿Conocés tus valores de presión arterial?
15/MAY/2018 / Cada 17 de mayo, la Organización Panamericana de la Salud / Organización Mundial de la Salud se une a la comunidad para conmemorar el Día Mundial de la Hipertensión como una oportunidad para insistir en la necesidad de trabajar en la prevención y control de la hipertensión.
La hipertensión arterial es uno de los principales factores de riesgo para padecer enfermedades cardiovasculares. Sin embargo, una gran parte de la población no conoce su condición de hipertenso. De los que reciben tratamiento un alto porcentaje no alcanzan los objetivos de control, porque no toman regularmente la medicación, porque las dosis son insuficientes o por otros factores de riesgo presentes.
La hipertensión arterial es una enfermedad frecuente que afecta a un tercio de la población adulta. Es una enfermedad que no da síntomas, se la considera una enfermedad silente. Si no se la trata, desencadena con el tiempo complicaciones severas como infarto de corazón, accidente cerebrovascular, daño renal y ocular. Cuando la presión arterial está tratada y controlada, se previene o evita la enfermedad cardiovascular.
La única manera de detectar la hipertensión es con su medición periódica. Existen dos medidas: la presión arterial sistólica (PAS) o máxima y la presión arterial diastólica (PAD) o mínima. Se considera presión arterial alta (hipertensión) cuando dicha medición máxima es mayor o igual a 140 y la mínima es de 90.
La hipertensión no puede curarse en la mayoría de los casos, pero sí puede controlarse. Para lograrlo debe seguirse un tratamiento regular de por vida para bajar la presión y mantenerla estable. La medicación es sólo una parte de ese tratamiento. Esto es considerando que en el hipertenso coexisten otros factores de riesgo como: antecedentes familiares (padres o hermanos hipertensos), el sexo masculino, la menopausia en la mujer, la edad, la obesidad, la ingesta de sal, el consumo excesivo de alcohol, el uso de algunos fármacos (antinflamatorios, antigripales, entre otros) y el sedentarismo.
Algunas recomendaciones que ayudan a la persona a controlar su tensión arterial:
Reducir el peso corporal Reducir el consumo de sal a 4-6 gramos al día. Reducir la ingesta de alcohol Reducir el consumo de café. Consumir alimentos ricos en potasio, como legumbres, frutas y verduras y pobre en grasas saturadas (patatas fritas, productos de pastelería y grasa vacuna). Realizar actividad física, de 30 a 45 minutos, un mínimo de 3 veces por semana Dejar de fumar Evitar la automedicación
DAMSU te propone que “CONOZCAS CUÁLES SON TUS VALORES DE PRESIÓN ARTERIAL”.
Solicitá un turno en mesa de turnos para un médico clínico o cardiólogo y realizá tu EXAMEN PERIÓDICO DE SALUD.
