Mariano Marchiotti

Médico Urólogo de DAMSU

El cáncer de próstata es el cáncer más frecuente del hombre. La posibilidad de desarrollar esta enfermedad aumenta con la edad desde los 50 años, afectando a 1 de cada 10 hombres en algún momento de su vida. La importancia que tiene el control es la detección precoz, es decir cuando el tumor es pequeño o localizado dentro de la próstata, el mismo puede ser curado. La detección temprana es la clave. Entonces ¿cómo hacer?, ¿cuándo?, ¿con quién?, ¿cómo prevenirlo? son las preguntas que se deben responder:

¿Cómo hacer?

El control prostático se realiza a través de 2 medidas básicas, complementarias e insustituibles, es decir la revisación de la próstata mediante el tacto rectal (TR), y la medición en sangre del antígeno prostático específico (APE). Si ambos son normales deberemos repetir el control al año. Si hubiera alguna alteración en el TR y/o el APE, el médico urólogo deberá evaluar la necesidad de realizar estudios adicionales.

 ¿Cuándo?

El control debe comenzar a partir de los 50 años y debe ser realizado anualmente. Pero, si hay antecedentes familiares de cáncer de próstata o cambios en la forma de orinar, el examen debe comenzar a los 40 años. 

 No espere a tener síntomas urinarios para realizar el control. Recuerde que el primer síntoma es la edad. NO PRETENDAMOS “CONOCER NUESTRO CUERPO”, PORQUE EL CÁNCER EN SUS ETAPAS INICIALES NO AVISA.

 ¿Con quién?

El control prostático lo realiza el Urólogo, porque es el especialista más entrenado para la revisación y para la interpretación de cambios mínimos que pueden conducir a la detección precoz de esta enfermedad.

 ¿Cómo prevenirlo?

Aún no se tienen respuestas precisas. Sólo se puede decir que el cáncer puede desarrollarse gracias a una predisposición genética hereditaria, y/o  a factores ambientales. Estos factores producen mutaciones que al final llevan al crecimiento descontrolado de las células glandulares de la próstata. Por ello, se recomienda reducir las dietas ricas en grasas, comer tomates (mejor cocidos), fruta y verdura. También se han publicado importantes trabajos científicos que prueban, con el uso de ciertos componentes, la reducción en la incidencia de este cáncer como los licopenos (presentes en el tomate), fitoesteroles como la isoflavonas de soja, vitamina E, Selenio, entre otros. Siempre estos productos deben ser indicados por el médico urólogo.

Informes: Programas Preventivos de DAMSU - horarios de atención de lunes a viernes de 8 a 13hs – tel. 4135000 int 3202.